El arroz también es importante, yo compro uno que encontré por casualidad, era el más barato de la tienda y queda suelto, tierno por fuera y consistente por dentro: justo como debe ser!
Ingredientes (para 2 personas)
- 150-170 g de arroz
- 15 g de mantequilla + 1 cucharada de aceite de oliva
- 150 g de champiñones
- 1/2 vaso de vino blanco
- 1 litro de caldo de pollo o verduras
- 30 g de queso parmesano (esto va en gustos, puedes echarle más o menos cantidad)
Preparación
1. En una sartén, ponemos la mantequilla y el aceite de oliva. Cuando esté caliente, echamos los champiñones cortados en trocitos muy pequeños. Rehógalo durante 5 minutos.
2. Después añadimos el arroz y mezclamos con los champiñones.
3. Añadimos el vino blanco y dejamos que lo absorba el arroz durante unos 2 minutos. Aquí bajamos la temperatura del fuego, para que el risotto se haga a fuego lento. El caldo tiene que estar muy caliente, a punto de hervir cuando lo echamos al arroz.
4. Después vamos añadimos un cazo del caldo y dejamos que se absorba
5. Repetimos el paso 4 tantas veces como sea necesario hasta que el arroz quede en su punto (tierno por fuera y consistente por dentro). Tardará unos 20 minutos.
6. Apagamos el fuego y echamos queso parmesano rallado por encima.
En el punto 6 para darle un toque de cremosidad se puede añadir antes del parmesano un poquito de mantequilla y remover. Yo no lo suelo hacer por dos razones: la primera porque siempre se me olvida, y la segunda para no abusar de la mantequilla. Pero la verdad que le da un toque definitivo!
!Bueno maestra, que plato!. El risoto es un plato del norte de Italia muy famoso. Yo voy hacer tú receta porque parece exquisita, ya te escribiré en el blog contandote como ha salido.
ResponderEliminarMe gusta el plato parece muy Zen.